Saltar al contenido
A

Importancia del almidón

El almidón, o fécula, es una macromolécula conformada por dos polisacáridos, la amilosa (en proporción del 25 %) y la amilopectina (75 %). Es un glúcido de reserva en la mayoría de los vegetales y define las propiedades de la harina y de los productos de panadería y repostería. Es el único polisacárido vegetal asimilable por el cuerpo humano, y por esa razón es un nutriente que debe estar presente en nuestra dieta, es rápido y fácil de asimilar, aportando energía.

¿Para qué sirve?

En la botánica, el almidón es la forma en la cual las plantas almacenan su alimento en las raíces como los tubérculos, en frutas y en semillas, el almidón luce como un polvo blanquecino compuesto por micropartículas que lo dotan de gran valor biológico.

Los vegetales lo sintetizan a partir del dióxido de carbono en la atmosfera y del agua que toman del suelo. Las plantas forman  entre estas moléculas para formar las largas cadenas del almidón que pueden contar con 2000 o 3000 unidades de glucosa.

Nuestra saliva cuenta con una enzima que puede romper las cadenas de almidón, la ptialina, ella se encarga de romper el almidón en unidades más pequeñas: azúcares.

El almidón se encuentra en alimentos como el pan, el arroz, la pasta, las patatas, los cereales, el maíz, las frutas, la leche, bebidas gaseosas y otros dulces. Es necesario para mantener los niveles de glucosa en sangre en valores adecuados.

En la antigüedad, el almidón se empleaba luego de lavar la ropa para lograr que con el planchado quedara tersa y no se arrugara.

También se emplea como agente antiadherente, como adhesivo, en la preparación de embalajes de espuma, como aditivo para algunos alimentos, sobre todo carnes frías y fiambres.

Importancia del Almidón

El almidón es una fuente de energía para el organismo y para diferentes plantas. Nuestro organismo metaboliza el almidón, desdobla sus moléculas y las convierten en glucosa, fructosa y otros azucares para su uso como fuente de energía.

Es necesario para la alimentación celular, permite el desarrollo de nuevas células y permite el mantenimiento y funcionamiento de las que están presentes.