La cultura estética es el desarrollo social que genera el arte en una persona, desarrollo que puede forjar mediante la práctica de una disciplina artística como el canto o el teatro. La cultura estética permite que la persona exponga su perspectiva y recree sus ideas, al igual que el resto de las ciencias sociales.
¿Qué es?
Son las relaciones que desarrolla un individuo consigo mismo o con la sociedad, a través de lazos emocionales, simbólicos y sensibles (mediante los sentidos), utilizando como móvil el arte.
También se define como el resultado de la percepción sensible que se obtiene de la naturaleza de algún elemento y se intenta destacar su belleza recreándola. Por ejemplo: cuando alguien dibuja (o recrea) un sol radiante porque le parece “hermoso” el color de ese elemento en el plano real.
El ser humano desarrolla la capacidad de percepción por medio del arte, y la cultura estética engloba determinadas áreas que llevan a la persona a expresarse, vincularse e interrelacionarse mediante su potencial artístico.
Estas áreas son el arte plástico como la pintura o el dibujo, la música y el teatro, o algún otro tipo de arte representativo, por medio del cual una persona puede expresar su interpretación de la belleza o justificar sus gustos.
Importancia de la cultura estética
- La cultura estética representa un aporte imprescindible en la formación de la personalidad de un individuo, ya que incentiva y aumenta su sensibilidad, lo que permite el desarrollo general de sus facultades. Igualmente favorece el estudio personal, así como también el entendimiento del mundo.
- Mediante la cultura estética una persona puede aumentar su enriquecimiento cultural de distintas maneras. Primero, enseña a la persona a expresarse, lo que abarca el desenvolvimiento del mismo en todos sus aspectos, y segundo, le permite desarrollar sus ideas o exponer sus conocimientos, lo que apremia su confianza.
- La cultura estética potencia las capacidades de una persona descubriendo la agudeza de sus sentidos a la hora de transformar la percepción obtenida por los órganos de los sentidos (ojos, nariz, oídos y boca) en ideas. De esta manera, la persona puede desarrollar unos sentidos más que otros, por ejemplo, el oído en los músicos.