La geomorfología, estudia los procesos que intervienen en la creación, sostenibilidad y destrucción de la superficie de la tierra. Analiza todas las características de los suelos, así como de la naturaleza en general.
Permite la designación de nombres, zonas geográficas o relieves, de acuerdo a sus potencialidades naturales o minerales. La geomorfología es una ciencia que estudia la tierra. De allí su nombre geo que significa tierra y morfología que designa a todos los estudios referentes a ella.
No solo las particularidades superficiales, sino desde el núcleo hasta las capas externas que permiten dar vida a elementos orgánicos, por ejemplo: las zonas húmedas o secas donde habitan las plantas.
Importancia de la geomorfología
Los geólogos son algunos de los responsables del estudio de la geomorfología. Ellos tienen la capacidad de analizar las zonas exploradas de acuerdo a sus recursos naturales o minerales. Obteniendo así nuevos relieves o zonas geográficas que serán registradas para su aprovechamiento.
La geomorfología posee un gran valor para ciencias como la agronomía, la agricultura, la matemática, la arquitectura, la minería, la geografía y la ingeniería. Su aplicación de conceptos geométricos para lograr describir la realidad física así como la gravitacional.
¿Para qué sirve la geomorfología?
A través de los escritos referidos a la geomorfología se puede lograr entender la evolución de la tierra, desde perspectivas científicas que explican los cambios como un balance dinámico que no se detiene nunca y que evoluciona en el tiempo.
La geomorfología es la madre de todas las ciencias destinadas al conocimiento de la tierra. Esta metodología se enfoca en el conocimiento de todas las partes existentes en el planeta desviando de alguna manera la intervención del hombre en sus resultados.
Esto da cabida a otros estudios o ramificaciones de ella misma, como por ejemplo la geografía humana.