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I

Importancia del imperio carolingio

El imperio carolingio fue el imperio dirigido por Carlos el magno, hijo del noble “Pipino el Breve”, quien fue el responsable de destronar al último de los reyes merovingios dando origen a un nuevo reinado para los francos. El imperio carolingio es conocido en la historia universal como un renacimiento de la cultura occidental.

¿Qué es?

El imperio carolingio fue un reinado germano que nació de la familia noble de Carlos Martel (abuelo de Carlomagno) quien junto a su hijo Pipino el Breve, lograron constituir un nuevo reinado para los francos. A finales del siglo VII Pipino dividiría el reino entre sus dos hijos, pero al morir uno de ellos tuvo absoluto poder Carlomagno.

Carlomagno o Carlos el magno, que significa Carlos el grande, fue uno de los monarcas más reconocidos de Europa en la edad media. Su monarquía fue catalogada como “imperio” por el Papa León III.

El imperio carolingio se extendió por Alemania, Italia, España, atravesando el atlántico y el mar báltico. Al coronarse, Carlomagno se propuso unificar el imperio romano además de  establecer el cristianismo en Europa, lo cual logró con su eficaz cambio en la cultura de diversas sociedades.

La caída del imperio carolingio vino años después de la muerte de rey Carlomagno y de manera progresiva, pues su hijo “Ludovico Pío” reinó en un ambiente conflictivo. Tras su muerte, sus 3 hijos se dividieron los territorios en el tratado de Verdún.

La división entre Lotario, Luis el germánico y Carlos el calvó (hijos de Ludovico Pío) terminó en la desintegración absoluta del imperio forjado por Carlomagno.

Importancia del imperio carolingio

El reinado de la familia de Carlos el Magno (conocido como imperio carolingio) fue una gran fuente cultural denominada como renacimiento carolingio, pues supuso un renacimiento para la sociedad de la edad media.

Su importancia histórica, se centra en los valores cristianos que se establecieron profundamente en sus territorios, convirtiéndose el imperio en el brazo derecho y la armadura de la iglesia romana.

El mismo Carlomagno era analfabeto, por lo cual implementó estrategias educativas basadas en la creación de escuelas en distintas áreas para ofrecerle al pueblo la oportunidad de ser culto. Llevó a las sociedades conocimientos en gramática, geometría, aritmética, música entre otras ciencias y artes, consolidando un apogeo cultural en el pueblo franco.

Otra manera de reforzar la cultura fue tras la instauración de iglesias con edificaciones bizantinas y romanas, consideradas las más grandes obras arquitectónicas del mundo.

De modo que el imperio carolingio, reforzó e instauró un movimiento sociocultural religioso que mantuvo la esencia del imperio romano e incluso recuperó la cultura latina generando un impacto permanente en la historia.