La Luna es el único satélite de nuestro planeta. Sin ella es imposible que existan las condiciones necesarias para la vida en la Tierra. La Luna es la responsable de mantener el equilibrio de los distintos ecosistemas con el medio ambiente.
¿Qué es la Luna?
La Luna es un satélite. Es uno de los cuerpos celestes más admirados por la humanidad. La atracción gravitatoria que ejerce la Luna es fundamental, crea una deformación sobre nuestro planeta creando corrientes marinas necesarias para los peces y su alimentación, el mantenimiento del clima y más.
Importancia de la Luna
La Luna es absolutamente necesaria para las mareas. De igual manera que la Tierra atrae la Luna, ella nos atrae, lo que crea un efecto de estiramiento del planeta aovándolo. Esto causa la subida y la bajada de la marea dos veces al día.
En el pasado la Luna se encontraba mucho más cerca de la Tierra que lo que está ahora, pues se aleja 3 centímetros por año. Si la Luna estuviera tan cerca como hace miles de millones de años, el cambio en las mareas podría ser de kilómetros.
Este efecto también atrajo enormes cantidades de minerales y sustancias químicas, los cuales formaron el primer líquido que dio lugar a las primeras moléculas orgánicas, los aminoácidos, la esencia de la vida en la Tierra. La Luna fue responsable de la vida en la Tierra.
La Luna contribuye a mantener la estabilidad del clima en nuestro planeta y las estaciones.
¿Qué pasaría si la Luna desaparece?
Debemos ser conscientes que la Luna se aleja gradualmente de nuestro planeta unos 3,8 cm por año. Las consecuencias de esto pueden ser devastadoras en el futuro, pues la Luna es la encargada de mantener el clima estable en nuestro planeta. Cuando la Luna se encuentre tan lejos que no ejerza gravedad sobre nuestro planeta, traería consecuencias climáticas tan graves que llevarían a la destrucción de la Tierra.
Sin el efecto de la Luna, el tiempo seria caótico. La Tierra daría una vuelta completa cada 8 horas en lugar de cada 24 horas, lo que llevaría a los años a tener 1095 días y reduciría nuestra esperanza de vida a 25 años.
Este giro provocaría vientos huracanados, una atmosfera muy rica en oxígeno y un campo magnético tres veces más intenso. Estos cambios causaría la extinción del 80% de las especies animales.