El olfato es el sentido por el cual se puede percibir y diferenciar los olores. Funciona a través de la nariz donde se encuentran los quimiorreceptores que se estimulan con las sustancias químicas que están presentes en el aire.
¿Qué es?
El olfato es uno de los cincos sentidos del cuerpo humano. Mediante el olfato las personas logran distinguir los olores y aromas. El olfato es un sentido que se ubican en la porción superior de las fosas nasales, en una membrana amarillenta que se conoce como pituitaria amarilla o región olfatoria.
En esta región se encuentran los receptores olfativos de un grupo de células epiteliales, las cuales son inervadas por el primer par craneal u olfatorio. El estimulo percibido por los quimiorreceptores viajan siguiendo la trayectoria del nervio hasta alcanzar la corteza cerebral.
Tras la respiración, las sustancias químicas presentes en el aire entran a la cavidad nasal. Una vez hacen contacto con la mucosa olfatoria o células epiteliales, estimulan las terminaciones del nervio olfativo que se encarga de conducir este mensaje al cerebro, el cual traducirá el mensaje.
Existen algunas curiosidades del olfato como su capacidad adaptativa, que puede llevar a que una persona que tiene cierto tiempo expuesta a un olor pierda su percepción progresivamente.
Importancia del olfato
El olfato es un sentido tan importante como los otros cuatro sentidos, ya que mediante él logramos percibir el mundo que nos rodea. El olfato permite que las personas tengan diferentes reacciones de acuerdo a los aromas del ambiente, pudiendo estar en estado de alerta ante una sustancia toxica o nauseabunda, o relajado frente a olores frescos y puros como el de las flores.
Las personas son capaces de percibir alrededor de 5000 olores, algunos de ellos estimulan el cuerpo humano despertando el apetito y otras son reactivas para las vías respiratorias causando reacciones anafilácticas (alergias) lo que lleva a la producción del estornudo. El estornudo por su parte, es una respuesta del cuerpo humano para limpiar las vías aéreas.
Los animales utilizan el olfato para cazar, para aparearse e incluso para resguardarse del peligro.